Posts Tagged ‘Pinky Spring’

LAS CHICAS SE DIVIERTEN

sábado, abril 18th, 2015

 

THE CEBRITIES

«The Cebrities»

Después de 4 semanas y 280 mensajes en el grupo de Whatsapp que comparten Pinky Spring, Freuda, Candela Flame, Pajarito y Wanda Matsuka, al fin pudieron cuadrar y hacer una quedada de amigas. Candela Flame es representante de artistas y tenía entradas para el concierto de The Cebrities, un grupo de música soul que les encantaba a todas.

Desde hacía un tiempo Pinky Spring, tenía un lío con uno al que llamaba Huracán. De vez en cuando aparecía por su casa, lanza en ristre. Lo que ocurría a continuación era algo parecido al paso de un ciclón.

Cuando se iba, de la misma manera que había venido, Pinky emergía toda despeinada, en medio del silencio, con la misma cara que ponen los personajes de las películas de catástrofes cuando ven alejarse un tornado, y se encendía un pitillo. Cuando sabía que iba a venir se preparaba: hacía estiramientos y ejercicios de precalentamiento. Mejor que la pillara con los músculos calientes, no fuera a ser que le diera una rampa en medio del vendaval.

Pinky Spring Hace gimnasia ©Tola Castillo

«Pinky Spring hace gimnasia»

El día anterior al que había quedado con sus amigas, se le ocurrió llamarlo para quedar a tomar un café.

-Me exiges demasiado, los estajanovistas nunca tenemos tiempo para hacer nada de ese estilo…

Cuando Pinky colgó, lo primero que hizo fue consultar la Wikipedia. Después de enterarse qué coño quería decir aquel palabro, se le pusieron los ojos oblicuos. Masculló para sus adentros:

-Entiendo…

Mar de fondo_Tola Castillo

El resto de sus amigas tampoco es que estuvieran muy finas:

Wanda Matsuka se había apuntado a una página de internet donde se conoce gente, pero le daba pereza. Se había pasado tantos años contestando mensajes como animadora en una hot line, que ahora lo de chatear le hacía tener la sensación de estar trabajando. Acostumbrada a mentir, no sabía ser ella. De pronto tenía que hacerse preguntas para las que no les encontraba una respuesta que quisiese compartir con un desconocido, sólo complejas.

Pajarito, que siempre había sido un espíritu libre, de emigrar los inviernos a Goa y perseguir la inspiración, ahora le preocupaba qué iba a ser de ella en su futuro inmediato.

La custodia compartida y las actividades extra escolares, hacía que la hija de Freuda tuviese una agenda tan complicada como la suya: la de alguien que  si no se mantenía en alto,  su empresa le darían zapato. Los fines de semana que estaba libre se apuntaba a talleres de mindfulness y coaching. Salía de allí convencida:

-Yo si puedo-. Le duraba hasta la mitad de semana.

Candela Flame estaba hasta el moño de pelearse con acreedores y por conseguir nuevos contratos para poder mantener abierto su chiringuito. También había empezado a tener sofocos y sudores. Las noches se le habían vuelto toledanas.

«Momento selfie»

The Cebrities lo dieron todo en el escenario y las amigas se rindieron a ellas. Bailaron, las corearon y se rieron.

Cuando ya se quedó la sala medio vacía, se fueron a la barra que atendía Robert, su camarero favorito, que les preparó unos gin tonics buenísimos, con ese ingrediente especial que se llama cariño.

Allí las cinco se pusieron al día. Compartieron confidencias, anécdotas y chismes suculentos. Por un rato Pinky Spring dejó de preguntarse por qué siempre le pasaban cosas absurdas con los hombres y Pajarito no pensó en el dinero. Wanda Matsuka interactuó en el mundo real, oyó su propia voz e intercambió miraditas y sonrisas con un mocetón bien plantado. Candela Flame recuperó su humor socarrón y expansivo, y Freuda se llevó para casa una buena dosis de terapia de la risa.

Como ya eran cenicientas de cierta edad, se retiraron a una hora discreta y ninguna perdió un zapato.


Pinky Spring interactiva

«Pinky Spring interactiva»

Al día siguiente Pinky Spring compartió la selfie que se habían hecho en las redes sociales. 48 le dieron al “me gusta”. Uno, que debía de estar fumado, consideraba que aquello era un fotón. En la mayoría de los mensajes comentaban lo bien que se lo montaban y lo divertidas que eran sus vidas.

Cuando los leían, las protagonistas de la foto se decían para sus adentros:

-Sí, sí, seguro. Todo el día ju,ju, ja,ja.

FIN

 

«Copas a la cabeza»

EL PROBLEMA DE LAS MUJERES ES UN PROBLEMA DE HOMBRES

miércoles, septiembre 11th, 2013

El problema de las mujeres es un problema de hombres

«El problema de las mujeres es un problema de hombres»

 «El problema de la mujer siempre ha sido un problema de hombres.» Pajarito, Candela Flame y Pinky Spring leyeron al mismo tiempo la cita de Simone de Beauvoir que alguien había colgado en el Facebook, y en ese momento cada una sintió que estaba dedicada a ella.

Candela Flame

 «Candela Flame»

Las tres amigas eran muy diferentes. Candela Flame era fuerte, independiente y segura, o al menos eso era lo que enseñaba de sí misma.


La silla vacía

«La silla vacía»

En secreto anhelaba poder quitarse la máscara de luchadora, y echaba de menos que hubiera un pecho cálido que sirviera de reposo a la mujer guerrera. Por eso, en  soledad, cuando se permitía ser débil, se llenaba de congoja.

 

Pajarito metida en un jardin

«Pajarito metida en un jardín»

En cambio Pajarito era un espíritu libre, difícil de aprehender. Su alma de artista la llevaba a ir siempre tras la inspiración. Lo que más se la estimulaba era el deseo. Por eso cuando alguien era objeto de su atención no sabía si lo que la enamoraba era la persona o lo que despertaba en ella. Sus relaciones poco convencionales eran complicadas de adjetivar y nunca sabía cuando las aves de paso levantarían el vuelo, o sería ella la que tendría que emigrar.

 

Pinky Spring bebe en la bañera

«Pinky Spring ahoga sus penas»

Aunque era de moral más bien distraída, como dice una canción, tal vez por ser pelirosa natural, Pinky Spring vivía el amor como si fuera una novela de ese mismo color. Pero al último que le había dado el título de su príncipe se le había vuelto rana y comprobaba con desesperación que le hacía guiños de complicidad a otras en el FB, y  a sus fotos y las canciones que colgaba pensando en él, escasamente les daba un me gusta.

Pinky Spring y sus amigas de paseo por el campo

 «Bucólicas».

Para distraer a sus almas inquietas las tres amigas decidieron marcharse de paseo al campo. Pensaban que alejándose de su cotidianidad, en un entorno bucólico, se olvidarían de esos seres que las hacían zozobrar.

Pinky y sus amigas paseando ente viñedos

 «Entre viñedos»

Mientras Pajarito contemplaba el revoloteo de los pájaros y Pinky Spring bromeaba sobre el milagro de que de una inocente uva saliera algo tan embriagador como el vino, Candela Flame aprovechaba para hacer ejercicio y ponerse más fuerte todavía.

 

Pajarito sin nido

 «Pajarito sin nido»

Hallarse en comunión con la naturaleza llenaba a Pajarito de gozo y se separó de sus amigas para concentrarse en sus sensaciones y dejar que su mente vagara. Trepó a un árbol para desde allí otear el vuelo de las aves migratorias. Entonces se apoderó de ella la nostalgia. En su mente se empezaron a juntar palabras que formaron un poema y  pensó en titularlo “Oda a los nidos vacíos”.

 

Sin cobertura

 «Sin cobertura»

 Con tanta paz y silencio Candela Flame y Pinky Spring  por un momento se sintieron libres de ataduras, y el aire puro las llenó de energía positiva, pero en cuando descubrieron que sus teléfonos móviles no tenían cobertura volvieron a entrar en pánico. Como si estar sin cobertura fuese una metáfora de sus vidas.

FIN

PD: Muchísimas gracias a mis queridísimos Iñaki y Aitor que me dejaron sus casas para hacer las fotos. También a mi amiga Merceditas y sus familia por lo bien que me lo pasé con ellos en Gandesa, y los perritos Tobi y Kina que me alegraron con su compañía las sesiones de fotos en el campo.

 

PINKY SPRING ESTÁ SIENDO MUY CUESTIONADA

domingo, julio 14th, 2013
Pinky Spring está fichada
«Pinky Spring está fichada»

Pinky Spring es uno de esos personajes que viven y dejan vivir.  Hedonista, poco práctica, idealista, blandita, y aunque sea algo superficial, para ella la vida sin poesía no tiene sentido. En el horóscopo chino es oveja, un mal signo para tiempos de crisis en lo que se te pide piel de iguana.

 

Pinky Spring meteorologa de la television  «Pinky Spring meteoróloga de la tele».

Con eso de tener que inventarse un cuentito para sobrevivir, un día se le ocurrió que podía hacerse presentadora de las noticias del tiempo como Nicole Kidman en “Todo por un sueño”. A veces las ideas más marcianas son las que funcionan y ha firmado un contrato discontinuo a tiempo parcial con un canal local. Sólo sus íntimos conocen que tiene sus momentos de pánico escénico y no sabe si va a confundir un tornado con un huracán, o si va a explicar bien lo que es una ciclogénesis explosiva. Como para gustos, colores, ahora tiene club de fans.

Pinky Spring y las bichas  «Pinky Spring y las bichas».

La vida funciona como un ecosistema y si mueves algo de un lado afecta al resto. Para bien y para mal. Ella, que pertenece a una familia disfuncional desde hace varias generaciones, está acostumbrada a las críticas, y a que las personas difíciles de catalogar pongan nerviosa a cierta gente, pero es que últimamente la tienen crucificada: que si no le gusta sudar ni en el gimnasio, que si es una exhibicionista, una lírica insoportable anti-cool, que si se comporta según su edad mental y no la biológica, que si la vida no es sólo juju-jaja…
Freuda psiconaliza a Pinky Spring mientras se come un platano
  «Freuda psicoanaliza a Pinky Spring mientras se come un plátano».
También a su amiga Freuda le ha dado por psicoanalizarla. Está licenciada por la Universidad de la Ciencia Infusa y es capaz de darle un veredicto de todo lo que le pasa y cómo solucionarlo en el tiempo que tarda en comerse un plátano. Si Pinky no está de acuerdo, o no acepta sus consejos, se enfada con ella y no se despeina por utilizar las confidencias que Pinky ha compartido con ella, y ha ido apuntando en una libreta, para ahora demostrarle que es una tarada. La lección de la UCI  que Freuda parece que se saltó fue aquella que explicaba que hay que saber usar  las palabras. Se perdonan, pero no siempre se olvidan.
Siluetas
 «Silueta rojas».
Pinky es como todo el mundo: le gusta sentirse valorada, le duele aceptar reproches y percibirse insegura. Entiende que hay críticas que merecen la pena ser escuchadas, pero que hay otras en las que  ha sido el diablo el que ha cargado las lenguas.
Ella se sabe imperfecta, se equivoca, es contradictoria, hay cosas de si misma que no le gustan nada y hace lo que puede para bregar con sus disfunciones. También que es la única testigo de todos sus segundos, días y noches.
Tampoco tiene explicaciones lógicas para todo lo que hace. A veces lo único que la mueve es una pulsión interior, otras, aunque sepa que le tocará pagar, es sólo porque le da la gana. Como diría Sinatra:

And more, much more than this,

I did it my way.

Yes, it was my way.

Que bonita es la amistad y que ricos estan los gin tonics

  «Qué bonita es la amistad y qué rico que están los gin tónics».

Por suerte, Pinky tiene a su amiga Pajarito que la quiere como es. Tampoco le miente, pero cuando emite un juicio de valor lo sabe hacer con clase. Con ella Pinky se siente cómoda y espontánea. En esos momentos piensa que no hay nada más bonito que la amistad y poder reírse, o llorar, en compañía de una amiga de esta vida, a veces llenas de penas, otras de alegrías, y por lo general tan loca.

Fin.

PD: Mi querido Fede, gracias por prestarme la cocina de tu casa. Otro beso para Agustina por hacer lo mismo con el salón de la suya. Mil gracias también a los que habéis pasado por este blog de visita. Espero que os haya merecido la pena y lo pasaseis bien con sus historias.

LUNA LLENA

sábado, marzo 30th, 2013

Bohemia en Malasaña

 «Bohemia en Malasaña»

Una noche de luna llena, el perrón que todos llevamos dentro aullaba pidiendo calle; decidí hacerle caso y sacarlo a pasear. Estaba aburrida de mis propios personajes y un poco de aire fresco me vendría bien. Antes de cerrar la puerta, renegué de ellas y manifesté mi deseo de abandonarlas a su suerte, que a partir de ahora mi vida sólo sería realidad.

 

Atrapados en el ordenador

 «Tripolaridad virtual»

Como había dejado el ordenador encendido, me oyeron y supieron mis intenciones. No les gustó nada.

Se negaban a desaparecer, así que decidieron escaparse y construirse ellas solas sus tramas, escribir sus guiones.

 

Caperucity y el lobo

 «¿Quién teme al lobo?»

Caperucity tenía viejas cuentas pendientes con un lobo malo. Había tenido tiempo para hacerse más fuerte y fue en su búsqueda.

Mientras iba a su encuentro se repetía:

-No importa el tamaño del perro en la pelea, si no el tamaño de la pelea en el perro…

 

Caperucity

 «Caperucity y el lobo»

Y así le demostró al lobo malo que si quería podía ser mucho más heavy que él.

 

Wanda y Pinky Spring

«Echando la tarde en casa de Pinky Spring»

Pinky Spring se fue a vivir a una casa amarilla con una gran pantalla de televisión que enchufaba a internet para poder ver en directo la webcam del acuario de Monterrey, uno de sus hobbies favoritos. Wanda se había ido con ella mientras decidía qué hacer. Toda su vida había sido una fantasía virtual y ya estaba cansada. Le hacía ilusión tener experiencias analógicas pero no sabía en qué se podía reciclar en un mundo real.

Pinky Spring

«Pinky Spring»

Pinky Spring no le hacía mucho caso y cada vez que oía el pío-pío anunciándole que había recibido un whatsapp se pensaba que se había llegado la primavera.  Florecían los almendros cuando comprobaba que eran de su lobito querendón diciéndole:

-¡Aúuu!

Creo que ya es hora de volver a casa y poner orden:  si las dejo solas se portan fatal.

FIN.

¡Ahuuuuu!

Nota 1- Los dibujos que decoran la casa de Pinky Spring son de Iñaki Muñoz. El de los perros es de Diego Castillo.

Nota 2- La foto del lobito bueno la he cogido de internet y no sé quién es el autor. Si alguna vez pasa por este rincón que sepa que estoy en contra de estas prácticas y que sólo la he utilizado con fines narrativos.

Nota 3- Muchas gracias a la familia Jaramillo-Yver-Bordeu por prestarme su casa.